Reminiscencias de la noche de San Juan


«A propósito de lo muy indicada y señalada como memorable que se encuentra en las referidas ordenanzas la fiesta de San Juan, no son pocos los autores que han divagado en demasía, llegando hasta a suponer que este mero hecho bastaba para acreditar a la orden como institución antiquísima, por cuanto habían conservado en sus rituales elementos tradicionales de los pueblos más antiguos, si no por el santo, sí por el día especialísimo del año en que cae precisamente aquél, en que coincide el solsticio de verano. La fiesta de San Juan o La San Juan, como dicen comúnmente en Francia, es una celebridad en la que más se ostentan los fuegos de la alegría y que, si bien conservada entre los pueblos cristianos, trae su origen sin disputa ninguna del paganismo. Aún en nuestros días se celebra en la Ucrania, en Rumanía, en muchas provincias de España, en Bretaña y sobre todo en la Alsacia».
Georges Danton

Con estas palabras Georges Danton comenzaba a abordar el tema de la célebre Noche de San Juan en su "Historia general de la masonería". A continuación, sobre el origen de la festividad, distinguiría entre quienes la consideraban una "derivación del culto al fuego" heredado de los parsis y aquéllos que observaban en ella "reminiscencias del druidismo céltico, herido de muerte por Julio César", siendo ambas ideas finalmente conjugadas por Danton en su propia conclusión:

«El exagerado culto que los celtas daban al fuego lo habían tomado de los parsis, después la Iglesia Católica, encontrando profundamente arraigada la costumbre y comprendiendo que sería romper de frente con los pueblos que la tenían, la admitió, pero aprovechándola en favor de uno de los cultos que tenía establecidos ya, dedicándola a San Juan Bautista».
Resultado de imagen de san juan fiesta
El solsticio de verano en el hemisferio norte coincide con el día 21 de junio. Se trata del día más largo del año, a partir del cual las horas de luz solar se irán acortando.

No parecía muy mal encaminado el revolucionario francés al referirse a la tradición de San Juan, una festividad pagana y precristiana que celebraba el solsticio de verano. Así se evidencia la estrecha vinculación existente entre naturaleza y hombre, dependiendo siempre el último de la primera para su supervivencia, la cual quedaba determinada en gran medida por la agricultura y los ciclos estacionales. Esta celebración más tarde sería, como apunta Danton, cristianizada por la Iglesia, aunque existe un desajuste de tres días entre el verdadero momento del solsticio (21 de junio) y el día que el santoral asigna a la natividad de Juan el Bautista (24 de junio).

Cercana a la superstición y a la magia, la Noche de San Juan ha sido considerada como una tradición "purificadora" en la que las hogueras juegan un papel fundamental. En torno a ellas se elabora un ritual que en muchas ocasiones consiste en bailes y juegos. En las zonas rurales de los Pirineos, como Isil (Pallars Sobirà, Lleida) se suelen prender antorchas o troncos en la montaña que son transportados mientras arden al pueblo, donde finalmente constituirán una gran hoguera.

Hoguera formada con troncos en Isil (Lleida)

Dejando a un lado el fuego, el agua es el otro elemento simbólico clave y en lugares costeros son muy comunes las prácticas vinculadas al mar. No obstante, en otros lugares como Asturias durante las celebraciones también cobran importancia los vegetales.

Ya sea para ganar salud durante el resto del año o para ahuyentar a los malos espíritus, los saltos sobre hogueras y brasas constituyen uno de los más populares elementos de esta celebración. En cuanto a otras de las costumbres más comunes en esta fiesta hemos de mencionar el uso de guirnaldas o adornos florales, la organización de verbenas, las peticiones y conjuros amorosos, así como diversos tipos de prácticas adivinatorias y mágicas con fines de salud.

Resultado de imagen de san juan alicante hogueras
Hogueras y noche del fuego en Orzán (Coruña)

Durante la Edad Media, esta celebración solía llevar aparejada en Castilla la organización de carreras de caballos, espectáculos de tauromaquia y otros espectáculos. En Nápoles, por ejemplo, las jóvenes sembraban granos de cebada en pequeñas macetas y luego vaticinaban futuras nupcias a partir del crecimiento de dichos vegetales, mientras que en Roma se encendían grandes hogueras alrededor de San Juan de Letrán.

De esta manera y a lo largo de la historia el día del solsticio de verano o de San Juan ha quedado fijado en la memoria colectiva occidental como uno de los acontecimientos más importantes del año.


Fuentes y recomendaciones bibliográficas:
DANTON, Georges. Historia General de la Masonería: desde los tiempos más remotos hasta nuestra era. Valladolid: Maxtor, 2012, pp. 261-262.
FERNÁNDEZ MONTES, Matilde (ed.). Etnología de Las Comunidades Autónomas. Madrid: CSIC, Ed. Doce Calles, 1996, pp. 78, 119, 122, 162, 224, 258, 327, 430, 617.
LADERO QUESADA, Miguel Ángel. "Medievo festivo", en BENITO RUANO, Eloy (coord.). Tópicos y realidades de la Edad Media (III). [Madrid]: Real Academia de la Historia, p. 114.
ZABALA, Fernanda. Leyendas y tradiciones valencianas (I). Valencia: Carena, 2006, pp. 213-215.


Comentarios